La Capilla SAN BENITO saluda con cariño a los vecinos y
los invita a participar de las siguientes actividades
MES de enero: Todos los sábados: 7, 14, 16, 23 y 30 a las 16.15 horas, Santa MISA.
MES de enero: Todos los sábados: 7, 14, 16, 23 y 30 a las 16.15 horas, Santa MISA.
- 1 de enero: SOLEMNIDAD SANTA MARÍA,
MADRE de DIOS * 50ª JORNADA MUNDIAL DE LA PAZ «La no violencia: un estilo de política para la paz» La Jornada
Mundial de la Paz, ha sido instituida por el Papa Pablo VI y se celebra
cada año el primero de enero. El Mensaje del Papa se envía a las Cancillerías
de todo el mundo y, también, señala la línea diplomática de la Santa Sede para
el año que inicia.
- 4-12 de Enero 2017: “Yo vengo a traerte Vida”
- 10ª Misión Juvenil Diocesana en Puerto San Julián, Santa Cruz
- 6 de Enero: La EPIFANÍA del Señor. / Reyes Magos
- 7 de enero: Misa del BAUTISMO del Señor.
- 14 de enero: Misa del 2* domingo del año. Ciclo A
- * 17 de Enero: San Antonio, abad
- * 20 de Enero: San Fabián
- 21 de enero: Misa del 3* domingo durante el año. Ciclo A
- * 21 de Enero: Santa Inés
- * 22 de Enero: Beata LAURA VICUÑA.
- * 25 de Enero: La conversión de San Pablo
- 28 de enero: Misa del 4* domingo durante el año. Ciclo A
- * 31 de Enero: SAN JUAN BOSCO, día de la Patagonia.
RECORDAMOS EL CUMPLEAÑOS
DE
10/01 CLAUDIA ERIKA TORRES.
Para la inscripción para la catequesis de los niños de primero y segundo año
de Comunión y Confirmación se efectuará en el mes de febrero.
CAPILLA SAN BENITO (Tráiler
del Padre Juan). Año
2017 /Enero Feliz Año Nuevo
Visita
de María Auxiliadora a las familias
MENSAJE DEL SANTO PADRE
FRANCISCO PARA LA CELEBRACIÓN DE LA 50 JORNADA MUNDIAL DE LA PAZ
1 DE ENERO DE 2017 «La
no violencia: un estilo de política para la paz»
Al comienzo de este
nuevo año formulo mis más sinceros deseos de paz para los pueblos y para las
naciones del mundo, para los Jefes de Estado y de Gobierno, así como para los
responsables de las comunidades religiosas y de los diversos sectores de la
sociedad civil. Deseo la paz a cada hombre, mujer, niño y niña, a la vez que
rezo para que la imagen y semejanza de Dios en cada persona nos permita
reconocernos unos a otros como dones sagrados dotados de una inmensa dignidad.
Especialmente en las situaciones de conflicto, respetemos su «dignidad más
profunda» y hagamos de la no violencia activa nuestro estilo de vida.
Este es el Mensaje para
la 50 Jornada Mundial de la Paz. En el primero, el beato Papa Pablo VI se dirigió, no sólo a los
católicos sino a todos los pueblos, con palabras inequívocas: «Ha aparecido
finalmente con mucha claridad que la paz es la línea única y verdadera del
progreso humano…». Advirtió del «peligro de creer que las controversias internacionales
no se pueden resolver por los caminos de la razón, es decir de las
negociaciones fundadas en el derecho, la justicia, la equidad, sino sólo por
los de las fuerzas espantosas y mortíferas». Por el contrario, citando Pacem in terris de su predecesor San Juan XXIII, exaltaba «el sentido y el
amor de la paz fundada sobre la verdad, sobre la justicia, sobre la libertad,
sobre el amor». Impresiona la actualidad de estas palabras, que hoy son
igualmente importantes y urgentes como hace cincuenta años.
En esta ocasión deseo
reflexionar sobre la no violencia como un estilo de política para la
paz, y pido a Dios que se conformen a la no violencia nuestros sentimientos y
valores personales más profundos. Que la caridad y la no violencia guíen el
modo de tratarnos en las relaciones interpersonales, sociales e
internacionales…
Un
mundo fragmentado El siglo pasado fue devastado por dos
horribles guerras mundiales, conoció la amenaza de la guerra nuclear y un gran
número de nuevos conflictos, pero hoy lamentablemente estamos ante una terrible
guerra mundial por partes. No es fácil saber si el mundo actualmente es más o
menos violento de lo que fue en el pasado, ni si los modernos medios de
comunicación y la movilidad que caracteriza nuestra época nos hace más
conscientes de la violencia o más habituados a ella…
La
Buena Noticia También
Jesús vivió en tiempos de violencia. Él enseñó que el verdadero campo de
batalla, en el que se enfrentan la violencia y la paz, es el corazón humano:
«Porque de dentro, del corazón del hombre, salen los pensamientos perversos» (Mc
7,21). Pero el mensaje de Cristo, ante esta realidad, ofrece una respuesta
radicalmente positiva: él predicó incansablemente el amor incondicional de Dios
que acoge y perdona, y enseñó a sus discípulos a amar a los enemigos (cf. Mt
5,44) y a poner la otra mejilla (cf. Mt 5,39). Por esto, quien acoge la
Buena Noticia de Jesús reconoce su propia violencia y se deja curar por la
misericordia de Dios, convirtiéndose a su vez en instrumento de reconciliación,
según la exhortación de san Francisco de Asís: «Que la paz que anunciáis de
palabra la tengáis, y en mayor medida, en vuestros corazones»…
Ser
hoy verdaderos discípulos de Jesús significa también
aceptar su propuesta de la no violencia. Esta —como ha afirmado mi predecesor Benedicto XVI— «es realista, porque tiene
en cuenta que en el mundo hay demasiada violencia, demasiada
injusticia y, por tanto, sólo se puede superar esta situación contraponiendo un
plus de amor, un plus de bondad. Este “plus” viene de Dios…
El amor a los enemigos
constituye el núcleo de la “revolución cristiana”» Precisamente, el evangelio
del amad a vuestros enemigos (cf. Lc 6,27) es considerado como
«la carta magna de la no violencia cristiana», que no se debe entender
como un «rendirse ante el mal […], sino en responder al mal con el bien (cf. Rm
12,17-21), rompiendo de este modo la cadena de la injusticia»
La
raíz doméstica de una política no violenta La
familia es el espacio indispensable en el que los cónyuges, padres e hijos,
hermanos y hermanas aprenden a comunicarse y a cuidarse unos a otros de modo
desinteresado, y donde los desacuerdos o incluso los conflictos deben ser
superados no con la fuerza, sino con el diálogo, el respeto, la búsqueda del
bien del otro, la misericordia y el perdón. Desde el seno de la familia, la
alegría se propaga al mundo y se irradia a toda la sociedad… El Jubileo de la
Misericordia, concluido el pasado mes de noviembre, nos ha invitado a mirar
dentro de nuestro corazón y a dejar que entre en él la misericordia de Dios. El
año jubilar nos ha hecho tomar conciencia del gran número y variedad de
personas, de grupos sociales que son tratados con indiferencia, que son
víctimas de injusticia, sufren violencia. Ellos forman parte de nuestra
«familia», son nuestros hermanos y hermanas. Por esto, las políticas de no
violencia deben comenzar dentro de los muros de casa para después extenderse a
toda la familia humana. …Una ecología integral también está hecha de simples
gestos cotidianos donde rompemos la lógica de la violencia, del
aprovechamiento, del egoísmo»…
En
conclusión Pidamos
a la Virgen que sea ella quien nos guíe. «Todos deseamos la paz; muchas
personas la construyen cada día con pequeños gestos; muchos sufren y soportan
pacientemente la fatiga de intentar edificarla». En el 2017, comprometámonos
con nuestra oración y acción a ser personas que aparten de su corazón, de sus
palabras y de sus gestos la violencia, y a construir comunidades no violentas,
que cuiden de la casa común. «Nada es imposible si nos dirigimos a Dios con
nuestra oración. Todos podemos ser artesanos de la paz».
Vaticano, 8 de diciembre de 2016 Francisco
Se
realizará en los barrios periféricos de PUERTO S. JULIAN, la 10* MISION JUVENIL
DIOCESANA: "YO VENGO A TRAERTE VIDA".
Acompañados
por el Obispo, los sacerdotes, religiosas de las comunidades presentes en la
Diócesis, alternarán momentos de oración y misión, formación y compartir,
Eucaristía y fiesta!